Consideramos a una persona elegante cuando tiene buen gusto y distinción para vestir, e incorpora a su forma de vida las reglas de buenas maneras propias de la sociedad en la que se desenvuelve, es decir, ser elegante, tener clase o estilo es una cuestión de actitud.
Y como actitud, forma parte del aprendizaje social. No hay una forma natural o innata de ser elegante, del mismo modo que no hay una forma natural de andar, por ejemplo mientras que en Europa se anda desde la cadera, con las piernas rectas, en el Japón tradicional se anda desde las rodillas. Estos rasgos son aprendidos, no se heredan genéticamente.
Se APRENDE A SER ELEGANTE, ESTILOSA Y A TENER CLASE, exactamente igual que se aprende el inglés o las matemáticas. Si naces y vives en España y tienes la suerte de crecer en un ambiente bilingüe español- inglés, aprenderás e incorporarás ambas lenguas mucho antes que quien lo aprende en una escuela y ya de adulto, pero el resultado será exactamente el mismo: AMBOS ESTAN PREPARADOS PARA COMUNICARSE EN ESE IDIOMA, PORQUE AMBOS ESTAN CAPACITADOS PARA APRENDER A HACERLO.
Tener clase, estilo y/o ser elegante no es innato, lo que es innato es la capacidad que tenemos todos para aprender a serlo.